Por primera vez en sus 226 años de historia, una mujer dirigirá Wall Street

El ascenso de Cunningham a uno de los puestos más importantes de Wall Street es un hito que quiebra un "techo de cristal" prevalente en la industria financiera. Aunque las mujeres han logrado avances en ese rincón crucial de la economía, y en Estados Unidos casi la mitad de los puestos directivos y profesionales son ocupados por mujeres, sólo el 12% de los CEO de las grandes firmas financieras son mujeres, según un análisis de Harvard Business Review.

Ese análisis, sobre 50 compañías de servicios financieros norteamericanas, reveló además que las mujeres ocupan solo el 20% de los roles de los comités ejecutivos, y el 22% de los puestos de los directorios.

El nombramiento de Cunningham, anticipado por el periódico The Wall Street Journal, se suma además al de Adena Friedman, quien se convirtió en CEO de Nasdaq, la bolsa donde se negocian acciones de empresas tecnológicas, en enero de 2017.La designación de Cunningham llega luego de meses en los que las empresas de Estados Unidos han intentado acomodarse a la nueva realidad que imprimió el movimiento #MeToo. Históricamente, el sector financiero ha sido dominado por la testosterona.

En los últimos años, las mujeres han comenzado a ocupar más cargos directivos y profesionales. Pero la cima aún es mayoritariamente territorio de los hombres.La bolsa neoyorquina sumará a otra mujer a fines de este año: la estatua llamada "Niña sin miedo" dejará de enfrentar al tradicional toro de Wall Street, y se mudará frente al edificio donde trabajará Cunningham. Quedará mirando hacia el edificio. Todo un símbolo: la estatua fue comisionada por una firma que promueve la igualdad de género a través de un índice compuesto por empresas que tienen un alto porcentaje relativo de mujeres en los puestos de liderazgo.